Hace casi tres años inicié transmisiones desde la frontera de este blog, Aldergut. A veces con altas, a veces con bajas, pero siempre con mucho ánimo y cariño para compartir con ustedes todo aquello que me ha sucedido a lo largo de mi corto tiempo en este planeta.Y fue muy grato conocerlos a todos ustedes por este medio.
Pero Aldergut nacio como un ejercicio para conocer en otros ámbitos a quién entonces era mi pareja, tratar de comprenderla y amarla. Sin embargo, la vida nos prepara muchos caminos y hoy día, mi vereda ya no es la misma que ella camina.
Sí, sé que cuando una puerta se cierra, otra nueva se abre. Claro, será distinta, diferente, con otras pasiones, nuevas sensibilidades, y que sin lugar a dudas, no dejaré de entregarme en cuerpo y alma a esta nueva oportunidad... pero para ello, tengo que cerrar capítulos, espacios, paso a pasito, poco a poco, a fin de concluir un ciclo que tuvo su origen hace ya más de dos años.
Estos últimos meses han sido de mucha reflexión y apoyo. He visto la importancia de la amistad, de la lealdad, de la ética para con cualquier relación. Mis alumnos, los amigos de montañismo (cosa curiosa, de éstos últimos a todos nos dieron aire entre enero y diciembre) y sobre todo la familia, han sabido amortiguar el golpe y recibirlo a uno con algo más que
un abrazo.Una amiga dice que estoy pasando por la llamada etapa de duelo, un periodo que todos pasamos cuando hemos experimentado la pérdida de algo, o alguien. Seguramente estoy en esta parte de mi vida, de la que no puedo iniciar otra sin antes dejar ir los recuerdos de mi relación pasada.
Personalmente, cuando termino una relación me propongo recorrer los lugares a los que fui con esta persona a fin de familiarizarme de nuevo con este ambiente, pero sin ella, obvio... y lo hago más que nada para no extrañarla y apropiarme de nueva cuenta de ese lugar, de ese espacio, de mi espacio...
Y me ha dado buenos resultados durante todas estas experiencias. Máxime que mi jefe recibió la noticia de mi rompimiento como una oportunidad para encargarme nuevos proyectos, los cuales han sido los mejores digestivos para este trago amargo... mmm... aunque debería considerar nuevos cambios $$$, jijiji...
Y creo que los cambios siempre vienen para bien. Por eso, hoy día tengo que decir adiós a un capítulo más en mi vida, mi Blog Aldergut. Les agradezco a todos y cada uno de ustedes esta cibercompañía de la cual me he sentido muy honrado en tenerla, sus consejos, propuestas, chistes y hasta a veces sus críticas han sabido alimentar mi vida... me he sentido no sólo afortunado sino enriquecido de todas las experiencias que he leído por parte de vosotros...
Es un paso q tengo que dar para sentirme bien, a gusto con mi escritura en un espacio como estos y poder crecer como persona, como ser humano. Con seguridad pronto volvere a visitarlos con otro espacio, pero por el momento no me siento capaz de emprender esta nueva aventura.
Se que comprenderan y no me queria ir sin depedirme de ustedes, sin ver por ultima vez a este blog que con tanto cariño lo hice y que me costo mucho entender como trabajaba, como se componia y como alimentarlo con cierta frecuencia a pesar de que el tiempo no me daba cuartel para escribir en el.
Dicen que los cuentos de hadas terminan siempre con un final feliz.
El mio termina de esa manera, feliz, de la misma manera que siempre lo soñe...
TSCHUSS
